PURPOSE: To prospectively assess the safety of the PleurX catheter in the management of recurrent ascites in patients with advanced abdominal malignancy and the consequent quality of life among these patients.
MATERIALS AND METHODS: This was a multicenter, prospective study of PleurX catheters implanted between March 2004 and April 2005 for control of nonhepatic abdominal ascites associated with malignancy. A total of 34 subjects were included (age range, 40-81 years; mean age, 64.3 y) who underwent 440 drainage sessions. Subjects kept records of volume and frequency of ascites drainage and recorded any difficulties encountered with use of the device. Subjects assessed symptoms before device insertion and weekly for as long as 12 weeks. Serum laboratory values reflecting overall volume status were tracked.
RESULTS: All catheter insertions were successful without major procedural complications. Twenty-nine (85%) required no catheter intervention or separate therapeutic paracentesis during 12 weeks observation or until the patient's death. Three needed a total of 13 interventions to restore catheter function. Before 12 weeks, 26 subjects died. Five discontinued catheter use as a result of catheter function despite the presence of ascites. Ascites resolved in five patients. Bloating and abdominal discomfort were significantly reduced at 2 and 8 weeks (P < .05). At weekly follow-up, 83%-100% of subjects reported their ascites to be well controlled. There were no significant changes in blood chemistry results between baseline and 12 weeks. One case of peritonitis at 10 weeks resolved with antibiotic treatment.
CONCLUSIONS: In terminally ill patients, PleurX catheter use resulted in improvement of ascites-related discomfort and was associated with low rates of serious adverse clinical events and catheter failure.
Sea o no la nutrición o hidratación artificial (ANH) pueden ser percibidos en los pacientes con enfermedades terminales han sido objeto de discusiones médicas y éticas. Información sobre las características de frecuencia y el fondo de la toma de decisiones de renunciar ANH está generalmente limitada a la configuración específica clínicos. El objetivo de este estudio fue comparar la práctica de renunciar a la ANH en seis países europeos: Bélgica, Dinamarca, Italia, Países Bajos, Suecia y Suiza. En cada país, las muestras aleatorias fueron extraídos de los registros de defunción. Posteriormente, el médico aviso recibido un cuestionario sobre las decisiones médicas que precedieron a la muerte del paciente. El número total de muertes estudiadas fue de 20.480. El porcentaje de todas las muertes que fueron precedidas por una decisión de renunciar a la ANH varió de 2,6% en Italia al 10,9% en los Países Bajos. En la mayoría de los países, las decisiones de renunciar ANH se hicieron con más frecuencia en pacientes mujeres, pacientes de 80 años o mayores y para los pacientes que murieron de una enfermedad maligna o enfermedad del sistema nervioso (incluyendo demencia). De los pacientes en los que se ANH no percibidos, el 67% -93% eran incompetentes. Los pacientes en quienes se ANH no percibidos no recibió más potencialmente acortan la vida de medicamentos para aliviar los síntomas que otros pacientes para quienes otros al final de su vida se habían tomado decisiones. Las decisiones de renunciar ANH se hacen en un porcentaje importante de pacientes con enfermedades terminales. Proporcionar a todos los pacientes que se encuentran en la fase terminal de una enfermedad letal con la ANH no parece ser un estándar ampliamente aceptado entre los médicos de Europa Occidental.
Objetivos En Japón, la mayoría de los pacientes de cáncer mueren en el hospital. El objetivo de este estudio fue evaluar la calidad del tratamiento al final de su vida para morir los pacientes con cáncer en salas generales y unidad de cuidados paliativos (UCP). Materiales y métodos Se realizó un estudio revisión retrospectiva. Los siguientes datos sobre los pacientes de cáncer que murieron en salas generales (N = 104) y PCU (N = 201) en un centro oncológico regional se recogieron: hacer de no resucitar decisiones (DNR), los tratamientos en los últimos 48 h de vida, y la agresividad del tratamiento del cáncer para los pacientes moribundos. Resultados principales órdenes de DNR se documentaron para la mayoría de los pacientes (94% en salas generales, el 98% en el PCU, p = 0,067) y las familias por lo general su consentimiento (97%, 97%, p = 0,307). Comparativa de salas generales con PCU mostró que, en los últimos 48 h de vida, significativamente mayor de pacientes en salas generales recibieron tratamiento de soporte vital (resucitación, 3,8%, 0%, p = 0,001; ventilación mecánica, 4,8%, 0%, p = 0,004), gran hidratación volumen (> 1.000 ml / día, 67%, 10%, p <0,001) con la administración continua (83%, 5%, p = 0,002) y un menor número de medicamentos de cuidados paliativos (opioides fuertes, 68% , 92%, p <0,001; corticosteroides, 49%, 70%, p <0,001; fármacos antiinflamatorios no esteroideos, 34%, 85%, p <0,001). En cuanto a la agresividad del tratamiento del cáncer, los pacientes recibieron un nuevo régimen de quimioterapia dentro de los 30 días de la muerte (3,0%), la quimioterapia dentro de los 14 días de la muerte (4,3%), y la entrada unidad de cuidados intensivos en el último mes de vida (3,3%). Conclusión Se encontró que las familias, no a los pacientes, consintieron DNR, y tratamientos de soporte vital fueron retenidos apropiadamente; Sin embargo, los pacientes en las salas generales recibieron hidratación excesiva, y el uso de fármacos de cuidados paliativos podrían mejorarse. La aplicación de nuestros resultados se puede utilizar para mejorar la atención clínica en salas generales.
We report our experience with a radiologically placed peritoneal port-catheter in palliation of malignant ascites. Port-catheters were successfully placed under ultrasonographic and fluoroscopic guidance in seven patients (five women, two men) who had symptomatic malignant ascites. The long-term primary patency rate was 100%. The mean duration of catheter function was 148 days. Seven patients had a total of 1040 port-days. Two patients received intraperitoneal chemotherapy via the port-catheter. There were no procedure-related mortality and major complications. Minor complications such as ascitic fluid leakage from the peritoneal entry site, migration of the catheter tip to the right upper quadrant, and reversal of the port reservoir occurred in four patients. None of these complications affected the drainage and required port explantation. In patients with symptomatic malignant ascites, a peritoneal port-catheter can provide palliation and eliminate multiple hospital visits for repeated paracentesis with high patency and low complication rates.
BACKGROUND: Malignant ascites is a manifestation of end stage events in a variety of cancers and associated with a poor prognosis. We evaluated the pattern of cancers causing malignant ascites and factors affecting survival.
PATIENTS AND METHODS: Patients coded with the International Classification of Diseases-9 coding system for malignant ascites over a 2-year period were reviewed. The clinicopathological data and patients' survival were compared among cancer groups.
RESULTS: There were 209 patients (140 females and 69 males), median age being 67 (30-98) years. The commonest cancer was ovarian followed by gastrointestinal (GI) cancers. Fifty-eight per cent of the patients had symptoms related to the ascites. Liver metastases were significantly commoner in the GI cancers (P = 0.0001). Fifty-four per cent of our patients presented with ascites at the initial diagnosis of their cancer. Paracentesis was given to 112, diuretics to 70 and chemotherapy to 103 patients. The median survival following diagnosis of ascites was 5.7 months. Ovarian cancer favoured longer survival while low serum albumin, low serum protein and liver metastases adversely affected survival. The independent prognostic factors for survival were cancer type, liver metastases and serum albumin.
CONCLUSION: The identified independent prognostic factors should be used to select patients for multimodality therapy for adequate palliation.
