Durante un episodio de sepsis, el fenómeno de respuesta inflamatoria sistémica desencadena un déficit en la acción y/o secreción de cortisol. Se ha planteado que el uso de corticoides podría tener un rol en el manejo de la sepsis, pero no existe consenso al respecto. Utilizando la base de datos Epistemonikos, la cual es mantenida mediante búsquedas en 30 bases de datos, identificamos 16 revisiones sistemáticas que en conjunto incluyen 64 estudios aleatorizados que responden esta pregunta. Realizamos un metanálisis y tablas de resumen de los resultados utilizando el método GRADE. Concluimos que el uso de corticoides en cuadros sépticos probablemente favorece la reversión del shock, acorta brevemente la estadía en unidades de cuidado intensivo, y podría disminuir la mortalidad, con escasos efectos adversos clínicamente relevantes.
Traditional teaching suggests that corticosteroids should be avoided during acute infectious episodes for fear of compromising the immune response. However, the outcome benefit shown through steroid administration in early septic shock implies this paranoia may be misplaced. We therefore performed a systematic review of the literature to identify the current strength of evidence for the use of corticosteroids in specified infections, and to make appropriate graded recommendations.
Durante un episodio de sepsis, el fenómeno de respuesta inflamatoria sistémica desencadena un déficit en la acción y/o secreción de cortisol. Se ha planteado que el uso de corticoides podría tener un rol en el manejo de la sepsis, pero no existe consenso al respecto. Utilizando la base de datos Epistemonikos, la cual es mantenida mediante búsquedas en 30 bases de datos, identificamos 16 revisiones sistemáticas que en conjunto incluyen 64 estudios aleatorizados que responden esta pregunta. Realizamos un metanálisis y tablas de resumen de los resultados utilizando el método GRADE. Concluimos que el uso de corticoides en cuadros sépticos probablemente favorece la reversión del shock, acorta brevemente la estadía en unidades de cuidado intensivo, y podría disminuir la mortalidad, con escasos efectos adversos clínicamente relevantes.