ANTECEDENTES: En el asma aguda inhalados beta₂-agonistas a menudo se administra mediante nebulizador para aliviar el broncoespasmo, pero algunos han argumentado que los inhaladores de dosis medidas con una cámara de retención (espaciador) pueden ser igualmente eficaces. Los nebulizadores requieren una fuente de energía y necesitan un mantenimiento regular, y son más caros en el entorno de la comunidad.
OBJETIVOS: Evaluar los efectos de las cámaras (espaciadores) en comparación con los nebulizadores para la entrega de beta₂-agonistas para el asma aguda.
ESTRATEGIA DE BÚSQUEDA: Se realizaron búsquedas en el Grupo Cochrane de Vías Respiratorias Trial Register y las listas de referencias de artículos. Se estableció contacto con los autores de los estudios para identificar ensayos adicionales. Fecha de la última búsqueda: febrero 2013.
Criterios de selección: Ensayos aleatorios en adultos y niños (a partir de los dos años de edad) con asma, cuando la entrega espaciador beta₂-agonista se comparó con nebulización húmeda.
Recopilación y análisis de datos: Dos revisores de forma independiente aplicaron los criterios de inclusión del estudio (un revisor para la primera versión de la revisión), extrajeron los datos y evaluaron los riesgos de sesgo. Los datos que faltaban se obtuvieron de los autores o estimados. Los resultados se presentan con intervalos de confianza del 95% (IC).
Resultados principales Esta revisión incluye un total de 1.897 niños y 729 adultos en 39 ensayos. Se realizaron treinta y tres ensayos en los ajustes de la sala de emergencia y comunitarios equivalentes, y seis ensayos fueron en pacientes con asma aguda (207 niños y 28 adultos). El método de entrega de beta₂-agonista no mostró una diferencia significativa en las tasas de ingreso hospitalario. En los adultos, el riesgo relativo (RR) de la admisión de espaciador frente nebulizador fue (IC del 95%: 0,61 a 1,43) 0,94. La razón de riesgo para los niños era (IC del 95%: 0,47 a 1,08; pruebas de calidad moderada) 0.71. En los niños, la duración de la estancia en el servicio de urgencias fue significativamente más corta cuando se utilizó el espaciador. La duración media en el departamento de emergencia para los niños que recibieron el tratamiento nebulizado fue de 103 minutos, y para los niños que recibieron tratamiento mediante espaciadores 33 minutos menos (IC del 95%: -43 a -24 minutos, pruebas de calidad moderada). Duración de la estancia en el servicio de urgencias para adultos fue similar para los dos métodos de entrega. El flujo máximo y el volumen espiratorio forzado también fueron similares para los dos métodos de entrega. La frecuencia del pulso fue menor para espaciador en los niños, diferencia media -5% basal (IC del 95% -8% a -2%, pruebas de calidad moderada), al igual que el riesgo de desarrollar temblor (RR 0,64; IC del 95%: 0,44 a 0,95; pruebas de calidad moderada).
Conclusiones de los revisores: entrega nebulizador producen resultados que no eran significativamente mejores que los inhaladores de dosis medidas entregadas por espaciador en adultos o niños, en los ensayos en los que se repiten y se valoró a la respuesta del participante tratamientos. Los espaciadores pueden tener algunas ventajas en comparación con los nebulizadores para los niños con asma aguda.
ANTECEDENTES: La terapia con corticosteroides sistémicos es fundamental para el tratamiento del asma aguda. El uso de corticosteroides inhalados (ICS) también puede ser beneficioso en este contexto.
Determinar el beneficio de ICS para el tratamiento de pacientes con asma aguda en el servicio de urgencias (SU).
ESTRATEGIA DE BÚSQUEDA: Se identificaron los ensayos clínicos controlados en el Registro Cochrane de Vías Respiratorias Grupo especializado de ensayos controlados. Bibliografías de los estudios incluidos, las revisiones y los textos conocidos, también se realizaron búsquedas. La última búsqueda fue septiembre de 2012.
Criterios de selección: Se incluyeron los ensayos controlados aleatorios (ECA) y ensayos controlados cuasialeatorios. Los estudios se incluyeron si los pacientes presentaron al servicio de urgencias o su equivalente con asma aguda, y fueron tratados con corticosteroides inhalados o placebo, además del tratamiento estándar. Dos revisores de forma independiente seleccionaron los artículos potencialmente relevantes, y luego seleccionaron de forma independiente los artículos para su inclusión. La calidad metodológica fue evaluada de forma independiente por dos revisores. Hay tres diferentes tipos de estudios que se incluyeron en esta revisión: 1) Estudios que comparan ICS vs placebo, con ningún corticosteroide sistémico dadas a los grupos de tratamiento, 2) estudios que comparan ICS vs placebo, con corticosteroides sistémicos dadas a ambos grupos de tratamiento y 3) los estudios que comparan ICS solo versus corticosteroides sistémicos. Para el análisis, los dos primeros tipos de estudios se incluyeron como subgrupos separados en el análisis primario (ICS frente a placebo), mientras que el tercer tipo de estudio se incluyeron en el análisis secundario (ICS vs sistémico con corticosteroides).
Recopilación y análisis de datos: Los datos fueron extraídos de forma independiente por dos revisores si los autores no podían verificar la validez de la información obtenida. Los datos que faltaban se obtuvieron de los autores o se calcularon a partir de otros datos presentados en el trabajo. Cuando los resultados dicotómicos apropiadas, individual y agrupados se informaron como odds ratios (OR) con intervalos de confianza del 95% (IC). Cuando los resultados continuos apropiados, individuales y combinadas se informaron como diferencias de medias (DM) o diferencias de medias estandarizadas (DME) con IC del 95%. El análisis primario empleó un modelo de efectos fijos y un modelo de efectos aleatorios se utilizó para el análisis de sensibilidad. La heterogeneidad se reporta el uso de I cuadrado (I2) estadísticas.
Resultados principales Veinte ensayos fueron seleccionados para su inclusión en el análisis primario (13 adulto pediátrica, siete), con un número total de 1403 pacientes. Los pacientes tratados con ICS eran menos propensos a ser ingresados en el hospital (OR 0,44, IC del 95%: 0,31 a 0,62; 12 estudios, los pacientes 960) y la heterogeneidad (I 2 = 27%) fue modesta. Esto representa una reducción de 32 a 17 hospitalizaciones por cada 100 pacientes tratados con corticosteroides inhalados en comparación con placebo. El análisis de subgrupos de los ingresos hospitalarios basados en el uso concomitante con corticosteroides sistémicos reveló que ambos subgrupos indicaron beneficios de ICS en la reducción de los ingresos hospitalarios (ICS y sistémica de corticosteroides con corticosteroides sistémicos versus: OR 0,54, IC del 95%: 0,36 a 0,81; 5 estudios, N = 433; ICS versus placebo: OR 0,27, IC del 95%: 0,14 a 0,52; 7 estudios, N = 527). Sin embargo, hubo una heterogeneidad moderada en el subgrupo con ICS, además de esteroides sistémicos (I2 = 52%). Los pacientes que reciben ICS demostraron mejorías pequeñas, significativas en el flujo espiratorio máximo (PEF.: MD 7% y el 95%: 3% a 11%) y el volumen espiratorio forzado en un segundo (FEV1: MD 6% y el 95%: 2% a 10 %) de tres a cuatro horas después del tratamiento). Sólo un pequeño número de estudios informaron estos resultados tales que pudieran ser incluidos en el meta-análisis y la mayor parte de los estudios en esta comparación no administrar corticosteroides sistémicos para los grupos de tratamiento. No hubo evidencia de efectos adversos significativos del tratamiento de ICS con respecto al temblor, o náuseas y vómitos. En el análisis secundario de los estudios que comparan ICS solo versus corticosteroides sistémicos solos, la heterogeneidad entre los estudios complicada combinación de los datos o sacar conclusiones fiables.
Conclusiones de los revisores: La terapia ICS reduce los ingresos hospitalarios en pacientes con asma aguda que no reciben tratamiento con corticoides por vía oral o intravenosa. También pueden reducir los ingresos cuando se utilizan junto con los corticosteroides sistémicos, sin embargo, la evidencia más reciente es contradictoria. No hay pruebas suficientes de que los resultados en el tratamiento con CI cambios clínicamente importantes en la función pulmonar o los resultados clínicos cuando se usan en el asma aguda, además de los corticosteroides sistémicos. Además, no hay suficiente evidencia que el tratamiento con CI puede ser utilizada en lugar de la terapia con corticosteroides sistémicos en el tratamiento de asma aguda. Se necesitan más investigaciones para aclarar la dosis del fármaco más adecuado y dispositivo de administración, y para definir qué pacientes tienen más probabilidades de beneficiarse del tratamiento con ICS. El uso de medidas similares y métodos de información de la función pulmonar, y una común, validado, la puntuación clínica sería de gran ayuda en futuras versiones de este meta-análisis.
ANTECEDENTES: Los pacientes con asma aguda atendidos en el departamento de emergencia (ED) suelen ser tratados con corticosteroides inhalados y agonistas beta2 sistémica después del alta. El uso de corticosteroides inhalados (ICS) después del alta también puede ser beneficioso en la mejora de resultados de los pacientes después de asma aguda.
OBJETIVOS: Determinar la efectividad de los CSI sobre los resultados en el tratamiento del asma aguda después del alta de la SU. Para cuantificar la eficacia del tratamiento con CI en el asma aguda después del alta, cuando se usa en adición a, o como un sustituto de, los corticosteroides sistémicos.
ESTRATEGIA DE BÚSQUEDA: ensayos clínicos controlados (ECC) que se identificaron en el Grupo de Revisión Cochrane de Vías Respiratorias registro, que incluye búsquedas sistemáticas en EMBASE, MEDLINE y CINAHL, complementadas con búsquedas manuales en revistas respiratorias y resúmenes de congresos. Además, los principales autores y las compañías farmacéuticas Se estableció contacto para identificar estudios elegibles. Bibliografías de los estudios incluidos, las revisiones y los textos conocidos también fueron registradas. Las búsquedas se han realizado hasta a septiembre de 2012
Criterios de selección: Se incluyeron ensayos controlados aleatorios (ECA) y ensayos controlados cuasialeatorios. Los estudios se incluyeron si los pacientes fueron tratados por asma aguda en el servicio de urgencias o su equivalente, y después del alta fueron tratados con terapia ICS ya sea como complemento o como un sustituto de los corticosteroides orales. Dos revisores de forma independiente evaluaron los artículos potencialmente pertinentes, la inclusión final y calidad metodológica.
Recopilación y análisis de datos: Los datos fueron extraídos de forma independiente por dos autores de la revisión, o confirmada por los autores del estudio. Varios autores y las compañías farmacéuticas proporcionaron datos no publicados. Los datos fueron analizados utilizando el software Cochrane Review Manager. En su caso, los resultados dicotómicos individuales y combinadas se informaron como odds ratios (OR) o los riesgos relativos (RR) con intervalos de confianza del 95% (IC). Cuando los resultados continuos apropiados, individuales y combinadas se informaron como diferencias de medias (DM) o diferencias de medias estandarizadas (DME) con IC del 95%. El análisis primario empleó un modelo de efectos fijos y se informaron heterogeneidad mediante I-cuadrado (I 2) estadísticas.
Resultados principales: Doce ensayos fueron elegibles para la inclusión. Tres de estos ensayos, con un total de 909 pacientes, en comparación ICS más corticosteroides sistémicos versus tratamiento con corticosteroides orales solos. No se demostró ningún beneficio del tratamiento con CI cuando se usa en adición a la terapia con corticosteroides orales en los ensayos. Las recaídas se redujo, sin embargo, esto no fue estadísticamente significativa con la adición del tratamiento con CI (OR 0,68, IC del 95%: 0,46 a 1,02; 3 estudios, N = 909). Además, no hubo diferencias estadísticamente significativas fueron demostradas entre los dos grupos para las recaídas que requieren ingreso, calidad de vida, puntuaciones de los síntomas o efectos adversos.
Nueve ensayos, con un total de 1296 pacientes compararon dosis altas de terapia con corticosteroides inhalados solos frente a la terapia con corticosteroides orales solos después del alta. No hubo diferencias significativas entre el tratamiento con CI demostró sola versus tratamiento oral con corticosteroides solos por las tasas de recaída (OR 1,00; 95%: 0,66 a 1,52; cuatro estudios, N = 684), admisiones al hospital, o en los resultados secundarios de los agonistas beta2 utilizar, los síntomas o eventos adversos. Sin embargo, el tamaño de la muestra no fue suficiente para excluir la posibilidad de que cualquiera de los tratamientos es significativamente inferior y las personas con asma grave fueron excluidos de estos ensayos.
Conclusiones de los revisores: No hay pruebas suficientes de que el tratamiento con CI proporcione un beneficio adicional cuando se utiliza en combinación con la terapia estándar con corticosteroides sistémicos en el alta para el asma aguda. Existe cierta evidencia de que la terapia de alta dosis CI solos puede ser tan efectiva como la terapia con corticosteroides orales cuando se usan en los asmáticos leves después del alta, sin embargo, los intervalos de confianza fueron demasiado grandes para tener la seguridad de la misma eficacia. Se necesita más investigación para aclarar si el tratamiento con CI deben ser empleados en el tratamiento del asma aguda después del alta de la. El análisis no sugiere ninguna razón para suspender el tratamiento habitual con corticosteroides inhalados después del alta, incluso si un curso de corticosteroides orales se prescriben.
ANTECEDENTES: El asma es una enfermedad respiratoria crónica que causa inflamación y cambios en las vías respiratorias. El cuidado de las personas con asma incluye la gestión de rutina y de urgencia a través de la atención primaria y terciaria, sin embargo, debido a la sub-óptima atención a largo plazo y los retrasos en la obtención de ayuda durante las exacerbaciones agudas, la mortalidad y la morbilidad relacionadas con el asma sigue siendo un importante problema de salud. Hay razones para creer que la ventilación no invasiva con presión positiva (VPPN) podría ser beneficioso para los pacientes con asma aguda grave, sin embargo, la evidencia que rodea a la eficacia de la VMNI no está claro, a pesar de su uso común en la práctica clínica.
OBJETIVOS: Determinar la eficacia de la VMNI en pacientes adultos con asma aguda grave en comparación con la atención médica habitual, con respecto a la mortalidad, la intubación traqueal, los cambios en los gases en sangre y la duración de la estancia hospitalaria.
ESTRATEGIA DE BÚSQUEDA: Se realizó una búsqueda en el Registro Cochrane de Vías Respiratorias Grupo Especializado de Ensayos Controlados (julio de 2012). Después de esto, las bibliografías de los estudios incluidos y los artículos de revisión en busca de estudios adicionales (julio de 2012).
Criterios de selección: Se incluyeron los ensayos controlados aleatorios en adultos con asma aguda grave como la razón principal para su presentación a la sala de emergencia o para la admisión al hospital. Diagnóstico del asma se definió según los criterios internacionalmente aceptados. Los estudios se incluyeron si la intervención fue la atención médica habitual para el tratamiento del asma aguda grave, más VPPN aplicada a través de una mascarilla nasal o en comparación con la atención médica habitual sola. Los estudios que incluyeron pacientes con características de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) fueron excluidos a menos que se proporcionaron datos por separado para los pacientes con asma en los dos estudios que reclutaron pacientes con EPOC y asma.
Recopilación y análisis de datos: Una combinación de los dos autores de la revisión evaluaron de forma independiente la calidad del ensayo y extrajeron los datos. Autores de los estudios para obtener información adicional cuando sea necesario. Todos los datos se analizaron mediante RevMan 5.1. Para las variables continuas, la diferencia de medias y el 95% intervalo de confianza se utilizaron y para las variables dicotómicas, cociente de riesgos con intervalos de confianza del 95% se calcularon.
Resultados principales: Se identificaron seis ensayos para la inclusión. Cinco estudios sobre 206 participantes contribuyeron con datos, mientras que un estudio estaba disponible en forma de resumen y no fue incorporado plenamente en esta revisión. Para el resultado primario de la intubación endotraqueal hubo dos estudios que contribuyeron con datos: dos intubaciones fueron necesarios 45 participantes en la VPPN y no intubaciones en 41 pacientes del grupo control (razón de riesgo 4,48, IC 95% 0,23 a 89,13). No hubo muertes en ninguno de estos estudios. Duración de la estancia hospitalaria se informó en dos estudios, aunque el metanálisis no fue posible. La hospitalización se informó en un pequeño estudio, en el que había tres entradas de 17 que VPPN y 10 ingresos de 16 en los pacientes control (RR 0,28, IC del 95%: 0,09 a 0,84).
Conclusiones de los revisores: Esta revisión de estudios ha puesto de manifiesto la escasez de datos que existen para apoyar el uso de la VMNI en pacientes en estado asmático. Como tal, este curso del tratamiento sigue siendo controvertido a pesar de su uso continuado en la práctica clínica actual. Más grandes, ensayos prospectivos controlados aleatorios de diseño metodológico riguroso son necesarios para determinar el papel de la VMNI en pacientes con asma.
Antecedentes: A pesar de varios estudios publicados han sugerido que el fumarato de formoterol puede ser equivalente a la de acción corta los agonistas beta2 (SABA) para el tratamiento de las exacerbaciones del asma, su papel en el tratamiento del asma aguda sigue siendo indefinido.
OBJETIVO: Evaluar la eficacia y seguridad de formoterol inhalado (en comparación con Sabas) para el tratamiento de urgencias de los pacientes con asma aguda.
MÉTODOS: Se llevaron a cabo búsquedas sistemáticas en MEDLINE, EMBASE, el Registro Cochrane de Ensayos Controlados, y la fabrica de los registros de los ensayos, sin restricción de idioma. Los resultados primarios fueron las medidas de la espirometría. Los resultados secundarios incluyeron último nivel de potasio sérico, frecuencia cardíaca, el intervalo QT corregido para electrocardiográfico del ritmo cardíaco, y los retiros totales.
Resultados: Nueve ensayos controlados aleatorios (incluyendo 576 participantes) fueron seleccionadas. No hay diferencia significativa puede ser detectado entre formoterol y Sabas para cualquiera de los puntos de tiempo seleccionados: 30 a 40 minutos después de la primera administración de fármacos del estudio (diferencia de medias estandarizada, -0,19, IC del 95% intervalo de confianza, -0,56 a 0,17; I2 = 75%), al final del tratamiento (diferencia de medias estandarizada, -0,25, IC del 95% intervalo de confianza, -0,72 a 0,13; I2 = 89%), y de 60 a 90 minutos después de la última dosis (diferencia de medias estandarizada, -0,13 , 95% intervalo de confianza, -0,55 a 0,28; I2 = 80%). Del mismo modo, no hubo diferencias significativas entre el formoterol y Sabas en cuanto al nivel final de potasio sérico, frecuencia cardíaca, el intervalo QT, la tasa de hospitalización, y los retiros totales.
CONCLUSIONES: Esta revisión sugiere que altas dosis de formoterol administrada a través de inhalador de polvo seco es bien tolerado y proporciona una broncodilatación rápida y eficaz, al igual que altas dosis de salbutamol o terbutalina a través de inhaladores de dosis medidas o nebulizador. El formoterol puede ser utilizado en el tratamiento del asma aguda en el departamento de emergencia.
ANTECEDENTES:
El uso de intervenciones educativas y conductuales en el tratamiento del asma crónica tiene una sólida base de pruebas. Las intervenciones educativas pueden tener una función en los adultos después de asistir a un servicio de urgencias.
OBJETIVOS:
Evaluar la efectividad de las intervenciones educativas administradas después de una exacerbación aguda del asma que causa una visita al servicio de urgencias.
ESTRATEGIA DE BÚSQUEDA:
Se hicieron búsquedas en el registro de ensayos del Grupo Cochrane de Vías Respiratorias (Cochrane Airways Group). Se contactó con los autores de los estudios para obtener información adicional. Se actualizaron las búsquedas en noviembre de 2006.
CRITERIOS DE SELECCIÓN:
Se seleccionaron los ensayos con diseño de grupos paralelos aleatorios que reclutaron adultos (> 17 años) que habían asistido a un servicio de urgencias con una exacerbación aguda del asma. La intervención de interés era cualquier intervención educativa (por ejemplo, un plan escrito para el tratamiento del asma).
OBTENCIÓN Y ANÁLISIS DE LOS DATOS:
Dos autores de la revisión evaluaron de forma independiente la calidad de los ensayos y extrajeron los datos. Se contactó con los autores de los estudios para obtener información adicional.
RESULTADOS PRINCIPALES:
Se incluyeron en la revisión 12 estudios con 1954 adultos. La educación disminuyó significativamente los ingresos posteriores al hospital (riesgo relativo 0,50; intervalo de confianza del 95%: 0,27 a 0,91); sin embargo, no disminuyó significativamente el riesgo de volver a presentarse en los servicios de urgencias (SU) durante el seguimiento del estudio (riesgo relativo 0,69; intervalo de confianza del 95%: 0,40 a 1,21). Debido al bajo número de estudios que contribuyeron a estos resultados fue difícil interpretar la ausencia de diferencias estadísticamente significativas entre los grupos con educación para el asma y los grupos de control en el flujo máximo, la calidad de vida, los retiros del estudio y los días perdidos. Un estudio a principios de los años noventa midió el coste y no encontró ninguna diferencia en los costes totales y en los costes relacionados con las visitas al médico y los ingresos al hospital. Si los datos se restringen al tratamiento en el servicio de urgencias, la educación tiene más bajos costes que el control.
CONCLUSIONES DE LOS AUTORES:
Esta revisión halló que las intervenciones educativas aplicadas en el servicio de urgencias reducen los ingresos posteriores por asma al hospital. Las intervenciones no disminuyeron significativamente la repetición de las visitas al SU; aunque la tendencia en efecto favorece las intervenciones educativas, los resultados agrupados no fueron estadísticamente significativos. La repercusión de la intervención educativa en este contexto sobre los resultados a más largo plazo en relación con la morbilidad por asma es incierta. Las prioridades para la investigación adicional en esta área incluyen la evaluación de la calidad de vida relacionada con la salud, la evaluación de la función pulmonar, la exploración de la relación entre el nivel socioeconómico y la morbilidad por asma y una mejor descripción de la intervención evaluada.
ANTECEDENTES: El asma aguda origina numerosas visitas al servicio de urgencias (SU) anualmente. Entre el 12% y el 16% tendrán recaídas que requerirán intervenciones adicionales en las dos semanas siguientes al alta del servicio de urgencia. El tratamiento del asma aguda se basa en la rápida reducción del broncoespasmo y de la inflamación de las vías respiratorias.
OBJETIVOS: Determinar el beneficio de los corticosteroides (oral, intramuscular, o intravenoso) para el tratamiento de los pacientes asmáticos dados de alta de un contexto de atención de casos agudos (es decir, generalmente el departamento de urgencias) después de la evaluación y el tratamiento de una exacerbación aguda del asma.
ESTRATEGIA DE BÚSQUEDA: Se hicieron búsquedas en el Registro Especializado de Ensayos Controlados del Grupo Cochrane de Vías Respiratorias (Cochrane Airways Group) y en las listas de referencias de los artículos. Además, se contactó con los autores de todos los estudios incluidos para localicar estudios no publicados. La búsqueda más reciente se efectuó en octubre de 2006.
CRITERIOS DE SELECCIÓN: Ensayos controlados aleatorios que compararon dos tipos de corticosteroides (oral, intramuscular, o inhalado) con placebo para el tratamiento ambulatorio de las exacerbaciones del asma en adultos o niños.
RECOPILACIÓN Y ANÁLISIS DE DATOS: Dos revisores evaluaron de forma independiente la calidad de los ensayos para su inclusión y extrajeron los datos. Se estableció contacto con los autores de los estudios para obtener información adicional.
RESULTADOS PRINCIPALES: Se incluyen seis ensayos, que involucran a 374 personas. Un estudio usó corticosteroides por vía intramuscular, cinco usaron corticosteroides orales. La revisión se dividió en dos y aunque la última búsqueda no produjo ningún ensayo controlado con placebo adicional se incluyó un estudio IM adicional.
Significativamente, menos pacientes en el grupo con corticosteroides tuvieron recaídas que requerían atención adicional en la primera semana (riego relativo [RR] 0,38; intervalo de confianza [IC] del 95%: 0,2 a 0,74). Este efecto favorable se mantuvo durante los primeros 21 días (RR 0,47; IC del 95%: 0,25 a 0,89) y posteriormente hubo menos hospitalizaciones (RR 0,35; IC del 95%: 0,13 a 0,95). Los pacientes que recibieron corticosteroides tuvieron menos necesidad de usar agonistas beta (diferencia de medias [DM] -3,3 activaciones/día; IC del 95%: -5,6 a -1,0). Los cambios de las pruebas de la función pulmonar (DME 0,045; IC del 95%: -0,47 a 0,56) y los efectos secundarios (DME 0,03; IC del 95%: -0,38 a 0,44) en los siete a diez primeros días, a pesar de que fueron rara vez informados, no mostraron diferencias entre los grupos con tratamiento. Se identificó heterogeneidad estadísticamente significativa en los resultados de los efectos secundarios; todas las otras medidas de resultado fueron homogéneas. De estos resultados, tan sólo diez pacientes necesitaron ser tratados para prevenir una recaída que requirió atención adicional después de una exacerbación del asma.
CONCLUSIONES DE LOS AUTORES: Un tratamiento de corta duración con corticosteroides después de ser evaluado por una exacerbación del asma disminuye significativamente el número de recaídas que requieren atención adicional, las hospitalizaciones y el uso de agonistas beta, sin un aumento manifiesto de los efectos secundarios. Los corticosteroides intramusculares y orales son efectivos.
OBJETIVOS: Estimar el efecto del sulfato de magnesio por vía intravenosa y nebulizada en los ingresos hospitalarios y la función pulmonar en adultos y niños con asma aguda. MÉTODOS: Se realizó una revisión sistemática y meta-análisis de ensayos aleatorios y cuasialeatorios de sulfato de magnesio por vía intravenosa o nebulizada en el asma aguda. Los ensayos se identificaron mediante búsquedas en la literatura electrónica, sitios web relevantes de revistas y actas de congresos y el contacto con autores y expertos. Los datos se agruparon mediante efectos aleatorios meta-análisis del riesgo relativo (RR) de ingreso hospitalario y la diferencia de medias estandarizada (DME) en la función pulmonar. RESULTADOS: 24 estudios (15 por vía intravenosa, 9 nebulizado) que incorporan 1.669 pacientes fueron incluidos. El tratamiento intravenoso se asoció en adultos con evidencia débil de un efecto sobre la función respiratoria (DPE 0,25, 95% intervalo de confianza (IC) del -0,01 a 0,51, p = 0,05), pero no tiene efecto significativo sobre la admisión hospitalaria (RR 0,87, IC del 95% 0,70 a 1,08, p = 0,22), y en niños con un efecto significativo sobre la función respiratoria (DME 1,94, IC 95%: 0,80 a 3,08, p <0,001) y el ingreso en el hospital (RR 0,70, IC 95%: 0,54 a 0,90, p = 0,005). El tratamiento nebulizado se asocia en adultos con evidencia débil de un efecto sobre la función respiratoria (DME 0,17, IC 95%: -0,02 a 0,36, p = 0,09), y el ingreso en el hospital (RR 0,68, IC 95%: 0,46 a 1,02, p = 0,06) , y en niños que no tienen efecto significativo sobre la función respiratoria (DME -0,26, IC del 95% -1,49 a 0,98, p = 0,69) o el ingreso en el hospital (RR 2,0, IC 95%: 0,19 a 20,93, p = 0,56). CONCLUSIÓN: El sulfato de magnesio intravenoso parece ser un tratamiento eficaz en los niños. Se necesitan ensayos adicionales de sulfato de magnesio por vía intravenosa y nebulizada en los adultos y sulfato de magnesio nebulizado en los niños.
ANTECEDENTES: Los preparados de helio y oxígeno (heliox) han sido utilizados esporádicamente en medicamentos respiratorios durante décadas. Su uso en emergencias respiratorias agudas, como por ejemplo asma, ha sido objeto de considerables debates. A pesar de que transcurrieron más de 60 años desde que se propuso por primera vez, el papel del heliox en el tratamiento de pacientes con asma aguda grave aún es incierto.
OBJETIVOS: Determinar el efecto del agregado de heliox a la atención médica estándar en el curso del asma aguda, medido por las pruebas de función pulmonar y las variables principales de evaluación clínica.
ESTRATEGIA DE BÚSQUEDA: Los ensayos controlados aleatorios se identificaron en el Registro Especializado del Grupo Cochrane de Vías Aéreas (Cochrane Airways Group). Además, se estableció contacto con los autores primarios y expertos y se realizaron búsquedas en las listas de referencias de los artículos. Las búsquedas se actualizaron hasta agosto de 2005.
CRITERIOS DE SELECCIÓN: 1) ensayos controlados, simples o doble ciegos, aleatorios; 2) niños o adultos con diagnóstico clínico de asma aguda atendidos en salas de urgencias o ámbitos de atención aguda equivalentes; y 3) tratamiento de inhalación de heliox comparado con placebo (oxígeno o aire).
RECOPILACIÓN Y ANÁLISIS DE DATOS: Dos revisores analizaron de manera independiente los estudios para su inclusión y evaluación de calidad; las discrepancias se resolvieron a través de un tercer revisor y mediante consenso.
RESULTADOS PRINCIPALES: Esta revisión se actualizó en 2006 para incluir cuatro ensayos nuevos; de esta manera, se incluyen diez ensayos con 544 pacientes con asma aguda. Siete estudios incluyeron a adultos y tres únicamente a niños. Tres fueron evaluados como de alta calidad (puntuación de Jadad > 3). Se registraron todas las pruebas de función pulmonar durante la administración de heliox (15 a 60 min.). El agrupamiento de los datos de ocho ensayos con datos para esta revisión no demostró diferencias significativas en los grupos (diferencias de medias estandarizadas -0,28; intervalo de confianza (IC) del 95%: -0,56 a 0,01). No hubo ninguna heterogeneidad significativa entre los estudios. El uso de heliox mejoró la función pulmonar sólo en el subgrupo de pacientes con disfunción pulmonar inicial más severa; sin embargo, esta conclusión se basa en un número reducido de estudios. No hubo diferencias significativas entre los grupos cuando se compararon estudios de adultos versus niños, y de dosis de heliox alta versus baja. Finalmente, los participantes tratados con heliox no mostraron ningún riesgo diferente significativo de ingreso al hospital al concluir el tratamiento (RR 0,83; IC del 95%: 0,66 a 1,08; P = 0,17; I = 0%).
CONCLUSIONES DE LOS AUTORES: Las pruebas existentes no respaldan la administración de mezclas de helio y oxígeno a pacientes en salas de urgencia con asma aguda. En este punto, el tratamiento con heliox no cumple ningún papel en el tratamiento inicial de pacientes con asma aguda. No obstante, las nuevas pruebas indican ciertos efectos beneficiosos en los pacientes con una obstrucción más grave. Dado que estas conclusiones se basan en comparaciones entre grupos y en pequeños estudios, se recomienda que sean interpretadas con cautela.
ANTECEDENTES: opiniones actuales sobre el uso de los corticosteroides inhalados (ICS) para el asma aguda subestimado su temprano (minutos) y el impacto clínico producido conclusiones de dudosa validez.
OBJETIVO: El análisis de la mejor evidencia disponible en la primera (1 a 4 h) el impacto clínico de ICS en los pacientes con asma aguda en el servicio de urgencias (SU) de ajuste.
MÉTODOS: Se publica (desde 1966 a 2006) de ensayos controlados aleatorios fueron recuperados utilizando diferentes bases de datos (MEDLINE, EMBASE, Cochrane Controlled Trials Register), revisiones bibliográficas de la investigación primaria, artículos de revisión y las citas de los textos. Medidas de resultado primarias fueron el ingreso y las tasas de disfunción eréctil de descarga.
RESULTADOS: Diecisiete estudios cumplieron los criterios para su inclusión en la revisión (470 adultos y 663 niños, niñas y adolescentes). Después de 2 a 4 h de protocolo, una mayor reducción de la tasa de ingreso se observó con los ensayos que utilizaron dosis múltiples de ICS (odds ratio [OR], 0,30; 95% intervalo de confianza [IC], 0,16 a 0,55), especialmente cuando eran en comparación con el placebo. Los pacientes tratados con corticosteroides inhalados también se muestra una mejoría clínica más rápida en comparación con el placebo o los corticoides sistémicos (SCS), lo que aumenta la probabilidad de que una de las primeras del alta (OR = 4,70, IC 95%, 2,97 a 7,42, p = 0,0001). La ventaja del uso de ICS también se demostró en medidas espirométricas y clínica tan pronto como 60 minutos. Estos beneficios se obtuvieron cuando los pacientes recibieron múltiples dosis de ICS, junto con los beta-agonistas en comparación con placebo o con SCS.
CONCLUSIONES: Los datos sugieren que los ICS presentar los primeros efectos beneficiosos (de 1 a 2 horas) cuando se utiliza en múltiples dosis administradas en intervalos de tiempo <o = 30 minutos más de 90 a 120 minutos. El efecto no genómico es un posible candidato al cubrir el enlace entre las vías moleculares y los efectos clínicos de los corticosteroides.
En el asma aguda inhalados beta₂-agonistas a menudo se administra mediante nebulizador para aliviar el broncoespasmo, pero algunos han argumentado que los inhaladores de dosis medidas con una cámara de retención (espaciador) pueden ser igualmente eficaces. Los nebulizadores requieren una fuente de energía y necesitan un mantenimiento regular, y son más caros en el entorno de la comunidad.
OBJETIVOS:
Evaluar los efectos de las cámaras (espaciadores) en comparación con los nebulizadores para la entrega de beta₂-agonistas para el asma aguda.
ESTRATEGIA DE BÚSQUEDA:
Se realizaron búsquedas en el Grupo Cochrane de Vías Respiratorias Trial Register y las listas de referencias de artículos. Se estableció contacto con los autores de los estudios para identificar ensayos adicionales. Fecha de la última búsqueda: febrero 2013. Criterios de selección: Ensayos aleatorios en adultos y niños (a partir de los dos años de edad) con asma, cuando la entrega espaciador beta₂-agonista se comparó con nebulización húmeda. Recopilación y análisis de datos: Dos revisores de forma independiente aplicaron los criterios de inclusión del estudio (un revisor para la primera versión de la revisión), extrajeron los datos y evaluaron los riesgos de sesgo. Los datos que faltaban se obtuvieron de los autores o estimados. Los resultados se presentan con intervalos de confianza del 95% (IC). Resultados principales Esta revisión incluye un total de 1.897 niños y 729 adultos en 39 ensayos. Se realizaron treinta y tres ensayos en los ajustes de la sala de emergencia y comunitarios equivalentes, y seis ensayos fueron en pacientes con asma aguda (207 niños y 28 adultos). El método de entrega de beta₂-agonista no mostró una diferencia significativa en las tasas de ingreso hospitalario. En los adultos, el riesgo relativo (RR) de la admisión de espaciador frente nebulizador fue (IC del 95%: 0,61 a 1,43) 0,94. La razón de riesgo para los niños era (IC del 95%: 0,47 a 1,08; pruebas de calidad moderada) 0.71. En los niños, la duración de la estancia en el servicio de urgencias fue significativamente más corta cuando se utilizó el espaciador. La duración media en el departamento de emergencia para los niños que recibieron el tratamiento nebulizado fue de 103 minutos, y para los niños que recibieron tratamiento mediante espaciadores 33 minutos menos (IC del 95%: -43 a -24 minutos, pruebas de calidad moderada). Duración de la estancia en el servicio de urgencias para adultos fue similar para los dos métodos de entrega. El flujo máximo y el volumen espiratorio forzado también fueron similares para los dos métodos de entrega. La frecuencia del pulso fue menor para espaciador en los niños, diferencia media -5% basal (IC del 95% -8% a -2%, pruebas de calidad moderada), al igual que el riesgo de desarrollar temblor (RR 0,64; IC del 95%: 0,44 a 0,95; pruebas de calidad moderada). Conclusiones de los revisores: entrega nebulizador producen resultados que no eran significativamente mejores que los inhaladores de dosis medidas entregadas por espaciador en adultos o niños, en los ensayos en los que se repiten y se valoró a la respuesta del participante tratamientos. Los espaciadores pueden tener algunas ventajas en comparación con los nebulizadores para los niños con asma aguda.